El primer viaje de la barcaza culminó con éxito: después de cinco días de
navegación por altamar, alrededor de 5.000 metros cúbicos de desechos
compactados llegaron a su destino para su disposición final, separación y
aprovechamiento.
Así, la UNGRD dio inicio a un operativo de gran magnitud que se extenderá
hasta principios de 2026 para limpiar la isla y transformar parte de los
materiales en oportunidades para el pueblo raizal.
El plan, liderado por la Unidad y ejecutado por el Consorcio Providencia
Limpia 2024, interviene los cuatro puntos críticos de la isla.
Cinco camiones realizan hasta 30 recorridos diarios para transportar el
material hasta el muelle, donde es depositado en la barcaza.
Los residuos son recibidos en un muelle internacional certificado,
clasificados en una planta especializada y separados para su
aprovechamiento.
Plásticos, metales y vidrios serán reciclados para generar ingresos
destinados a proyectos comunitarios en Providencia, mientras que el
material no reutilizable será dispuesto en un relleno sanitario autorizado.
La inversión de $40.000 millones contempla, además del transporte y la
disposición final de los residuos, la recuperación de suelos y un
acompañamiento social permanente durante la operación.
Esta operación abre el camino para que Providencia recupere su paisaje y
reactive el turismo, base de su economía local.