Estos espacios de alimentación beneficiarán directamente a 250 personas,
priorizando a adultos mayores, niños, mujeres cabeza de hogar y
personas en condición de pobreza extrema. Los comedores operarán con
personal local, lo que garantiza la sostenibilidad del servicio y promueve
la participación comunitaria.
“Los comedores populares acompañarán a la comunidad en su
recuperación y operarán durante 90 días. Esta es una de las primeras
acciones para garantizar el derecho a la alimentación y apoyar la
reconstrucción del tejido social y económico de la población”, afirmó
Carlos Carrillo, director de la UNGRD.
Los comedores que operan bajo la Resolución 0382 del 14 de mayo de
2025, fueron dotados con insumos y equipamiento que permiten ofrecer
menús balanceados, diseñados con asesoría técnica en nutrición y salud.
La UNGRD avanza paralelamente en el proceso de reconstrucción de
Paratebueno y Medina. Ya se definieron los diseños de las nuevas
viviendas sismorresistentes y se aseguraron recursos por $53.000
millones para la construcción de las primeras 368 unidades
habitacionales.