Con el propósito de ofrecer condiciones dignas a la población desplazada en el Catatumbo a causa del conflicto armado, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) desplegó un equipo psicosocial con más de 30 profesionales para brindar acompañamiento a estas comunidades y hacer más llevadera su situación.
Los profesionales de la UNGRD, entre ellos psicólogos y trabajadores sociales, cuentan con amplia experiencia en el manejo de eventos traumáticos derivados de situaciones de orden público y desastres. Este equipo recorre los nueve alojamientos dispuestos en Ocaña, Norte de Santander, para apoyar a la población que enfrenta esta difícil situación causada por los enfrentamientos entre grupos armados ilegales en la región.
"La labor inicial es hacer un acompañamiento para verificar cuáles son las condiciones de las personas en los diferentes alojamientos temporales. Evaluamos su estado emocional, el impacto y las consecuencias de este evento en sus vidas. Nuestro objetivo es garantizar que sean atendidas de manera digna, a pesar de su condición de desplazamiento", señaló Astrid Vergara, líder del equipo de gestión psicosocial.
"Lo que están viviendo las víctimas del Catatumbo es un evento altamente traumático que afecta su percepción de seguridad individual y familiar, donde el temor, la ira y la tristeza se convierten en emociones difíciles de manejar", agregó.
El acompañamiento se brinda en los siguientes alojamientos: Centro Vida, Coliseo Argelino Durán, Casa Misericordia, Hogar Carismático Jesús Vive,Plaza de Ferias, Salón Comunal Hatillo, Salón Comunal Nueva España, Coliseo de Tejo y CDI Nuevo Amanecer, que sirven como refugio temporal para más de 800 personas, según el Comité Municipal de Gestión del Riesgo de Desastres.
Durante los recorridos del equipo psicosocial, también se identifican las necesidades más urgentes de la población desplazada para garantizar condiciones dignas y avanzar en el restablecimiento de sus derechos.
Por otra parte, la UNGRD avanza en la coordinación para el acondicionamiento de la Plaza de Ferias de Ocaña como un alojamiento tipo A, con capacidad para 1.000 personas, que será el principal alojamiento temporal en el municipio.
En conjunto con la Gobernación de Norte de Santander, la Alcaldía de Ocaña, la Defensa Civil, el ICBF, Bomberos, la Policía Nacional y la Unidad para las Víctimas, se están estableciendo las condiciones necesarias para garantizar techo, alimentación, servicios de salud y acompañamiento
psicosocial.