En estos espacios, a través de una construcción colectiva y participativa, se identificaron los roles y responsabilidades, mecanismos de coordinación, instancias para la difusión y manejo de información, así como la definición de los niveles de alerta para cada volcán, lo cual facilitará el proceso de toma de decisiones en los municipios y departamentos, de acuerdo con los fenómenos volcánicos que pueden ocurrir en cada territorio.
Las jornadas contaron con la intervención del Servicio Geológico Colombiano, entidad que facilitó la comprensión de los mapas de amenaza y su incorporación en la planeación de la respuesta. Se resaltó la participación activa de los coordinadores municipales, quienes a partir del conocimiento de su territorio y sus contextos particulares brindaron valiosos aportes para la construcción de protocolos integrales y coherentes con sus condiciones específicas.
De igual manera, la UNGRD socializó el formato de identificación de elementos expuestos el cual tiene como objetivo recopilar y estandarizar información georreferenciada, cualitativa y cuantitativa de personas, medios de vida, edificaciones, y redes expuestas en las zonas de amenaza volcánica.
Esta actividad consigue unir los procesos de conocimiento y reducción del riesgo frente a fenómenos volcánicos, respondiendo a los programas planteados en el Plan Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres y contribuyendo con el fortalecimiento de la capacidad de respuesta nacional y territorial.
En los talleres se contó con la participación de los coordinadores municipales y departamentales de gestión del riesgo de: Ibagué, Cajamarca, Rovira, Flandes, Guamo, Espinal, Saldaña y Coello de la zona de amenaza alta del Volcán Cerro Machín (Tolima); y de Villamaría, Manizales, Chinchina (Caldas); así como Palocabildo, Murillo, Villahermosa, Honda, Mariquita, Herveo, Venadillo, Armero – Guayabal, Ambalema, Líbano, Lérida, Anzoategui y Santa Isabel de Tolima, todos ellos ubicados en la zona de influencia del Volcán Nevado del Ruiz.